Visita al hospital

No hace demasiado fui al hospital a visitar a un pariente "lejano". No lo conocía. Bueno sí, pero no. Sé que cuando era pequeña le he visto más veces, pero hacía años que no le veía...

Está muy enfermo, no recuerda casi nada, y la verdad es que no me enteré muy bien de lo que le sucedía, pero creo que en esta ocasión prefería eso.

Por la tarde llegamos al hospital, y de 5 personas que íbamos, primero subimos 3. Al llegar, la habitación en la que había dos pacientes (mi familiar y otro desconocido) estaba llenísima. Iba la última, y salude primero al enfermo, y luego a su hija, que estaba acompañándole. Tras saludar me hicieron sentarme. Creo que fue por la cara de horror que se quedó permanentemente grabada...

Cuando era una mocosa, y no siendo tan mocosa, quería y deseaba más que a nada: trabajar de médio o enfermera en un hospital. No sé por qué lo deseaba tanto. Cada vez que estoy dentro de uno me pongo malísima.

En realidad, me gusta ese olor que caracteriza a los centros de salud, no sé por qué, pero el ver a los enfermos y ese ambiente...

Se podría pensar que es porque al visitar a una persona mayor y que está en la camilla y tal... No da buensa sensación. Sí, pero no es solamente eso. De hecho, no hace tampoco mucho que tuve cita con un médico especialista... Y me pasó igual...

Es una tontería, pero es que detesto ir al hospital, para lo que sea. Bueno, miento, para ver a los bebés recién nacidos de mi familia no. ¡¡Son siempre tan bonitos!!


El caso era ese, que la habitación estaba llena, me hicieron sentarme, y para entretenerme y no observar al enfermo que estaba justo enfrente de mí (y es que cada vez que lo veía, un nudo en el estómago tenía), me puse a "repasar" a la otra familia. Era una familiar normal, del campo (es que también estaba algo pendiente a su conversación), y que hablaban un poco... Mmmmmmm, bestia, por así decirlo.

La visita acabó pronto, por suerte. Estaba desesperada por salir de allí. Y bueno, nos "piramos".

Sé que si estuviese enferma e ingresada en el hospital, me gustaría que me visitaran, por eso siempre me gusta ir a hacer visitas cuando alguien está "malito" allí, pero es que en ciertas ocasiones no lo soporto.

De todas formas no ocurre siempre así, tan "fuerte". Hace unos años, mi abuelo estuvo, y pasé horas y horas sin pasarlo tan mal, pero la verdad es que no estaba igual de enfermos, y creo que es eso lo que me agobia.

Qué asco eso de ir haciéndose mayor y tener que ir a estos sitios. Recuerdo cuando mis padres me dejaban en casa de alguna tía para ir ellos al hospital o lo que fuese...

Aunque una vez sí que me llevaron a ver a un amigo de la familia que estaba en coma (y el pobre falleció años después, que en paz descanse). Puede que tengo algo de pánico al escuchar que alguien está en coma por lo que vi ese día.

Entramos en la casa, que tenía un pequeño patio en la entrada, esas casas cucas, como les llamo yo. El recuerdo siguiente lo tengo medio borroso, pero sé que acabamos en una especie de pasillo con un sofá que estaba justo al lado de la habitación donde estaba aquel hombre en coma. Mi padre me dijo mil y una vez que no podía entrar para verlo, que no era bueno para mí, bla bla. Entonces, tiré un juguete (juraría que era una pelota o una canica) lejos, para poder ir a recogerla y así pasar justo por la puerta y poder ver a ese hombre que estaba en la cama. No sé por qué lo tuve que hacer... Vi algo que se grabó en mi mente, y desde hace más de 13 años no he conseguido olvidar para nada. Estaba tumbado, con sueros, pero no fue eso lo que me chocó. Fue su cuerpo, su rostro, sus ojos... Recuerdo el aspecto físico de ese hombre, o mejor dicho, hombretón, de hecho de peque pensaba que era un gigante. Pasó de ser pura energía y alegría a... Por así decirlo, un trocito de carne consumido y lleno de canas. No lo reconocí, no parecía él. Fue la última vez que le vi.

Creo que por eso le tengo ese "susto", porque siempre veo esa imagen. En realidad, hace unos meses, alguien entré en un coma, del cual se recuperó e intenté hacer "una gracia" por así decirlo, con la persona que me lo comentó. No está bien, ya, pero hacía poco que leí un mini artículo de psicología (o eso creo, jajaja), sobre que en edad de adultez, a muchas personas, para auto quitarse miedos, se lo intentaban tomar con un humor y tal y pascual. Yo juraría que no me funcionó... Y ahora que lo escribo-pienso, me siento verdadermante mal por hacer dicha gracia.



¡¡Se acabó por hoy!!